El primer franquismo en Manresa en un clic (1939-1959)

Homenajes y felicitaciones franquistas

Texto introductorio

Creación y reglamento de la medalla de la ciudad (1942-43)

 

Uno de los instrumentos más habitualmente utilizados por los municipios para distinguir personalidades destacadas del régimen eran las medallas. Manresa no fue una excepción. El Ayuntamiento redactó un reglamento y un protocolo para establecer los criterios de concesión de esta distinción, que recibieron figuras destacadas del franquismo.

Concesión de la Medalla de Oro de la Ciudad a José Antonio Girón de Velasco (1943)

La Medalla de Oro a Franc (1947)

Concesión de la Medalla de Oro al gobernador civil Felipe Acedo Colunga (1952)

Entrega de la Medalla de Oro al ministro Joaquín Ruiz Giménez (1952)

Medalla de Bronce de la Ciudad a los excombatientes de la “Centuria Audina" (1955)

Medalla de la Ciudad a Esteban Bilbao (1957)

Medalla de Oro de la Ciudad al general Despujol (1957)

Medalla de la Ciudad al banderín de excombatientes de la División Azul (1958)

Homenajes a Julio Pérez Salas, "liberador" de Manresa

Nombramiento como hijo adoptivo de la ciudad (1940)

Entrega de una placa de la Cruz Roja (1943)

Asistencia al acto de nombramiento de hijo adoptivo de Tudela(1946)

Entrega del sable de honor (1948)

Otros homenajes y nombramientos

Texto introductorio

En el marco de la glorificación propagandística de la dictadura, otra constante fue la de los homenajes, felicitaciones y entregas de medallas de  la ciudad a personalidades del régimen con los cuales era imprescindible mantener buenas relaciones.

De este modo, dentro del contexto de miseria de la posguerra de los años 40, en junio de 1943 el alcalde Montardit creó la medalla de la ciudad y  aprobó la concesión de la medalla de oro al propio Franco. Con este objetivo, el Ayuntamiento pidió aportaciones voluntarias de oro. La medalla no fue entregada al dictador hasta 1947 por parte del entonces alcalde Prat Pons, quien alabó la "designación Divina" que había permitido ganar la guerra al dictador.

Cronológicamente, en julio de 1943, el primero en recibir una medalla de  oro de la ciudad fue José Antonio Girón de Velasco, ministro de Trabajo y  Delegado Nacional de Excombatientes. Los excombatientes manresanos (del bando franquista, naturalmente) también recibieron —o bien sus familiares, en el caso de aquellos que habían muerto en el frente— la correspondiente medalla, aunque de cobre.

En los años 50 otros cargos importantes del régimen que recibieron la  distinción serían el gobernador civil de Barcelona Felipe Acedo Colunga, el ministro de Educación Joaquín Ruiz-Giménez y el presidente de las Cortes Españolas Esteban Bilbao quien, además, recibió el título de hijo adoptivo de la ciudad.

Otros homenajes significativos serían el del "liberador de  Manresa", el teniente coronel Julio Pérez Salas, también declarado hijo adoptivo. En 1948, con motivo de su ascenso a general, recibió un sable de honor de  parte del consistorio manresano.

Finalmente, en el decurso de aquellos años se rindieron también varios homenajes a dirigentes e industriales locales y autoridades eclesiásticas y  militares. Es necesario destacar el que se tributó al general José de Arjona, a quien sorprendió, con un encendido elogio a Cataluña y a la población catalana, en contraposición con la injusta envidia que, según él, despertaba entre los habitantes de otros puntos de España.

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