6/3/1938
Daniel Torra Ávila
Albert Torra Gijón (Reb. 11-3-38 / Cont. 11-3-38)
Querido hermano:
Al ir hoy a recoger la carta a lista, me he encontrado con la grata sorpresa de recibir cuatro cartas tuyas, junto con otras dos más: una de Roca y otra de Antonio Serchs. Aunque no puedo comprender el porqué hasta hoy no llegaron a mis manos estas cartas que tienen, las tuyas, dos de ellas, en el matasellos de Lista de Ávila la fecha 16 y 17 respectivamente. Y además de estas, dos de tuyas fecha 2 y 4 de marzo. Paso pues a contestarte en todos sus puntos estas dos últimas epístolas. Las otras dos ya no tenían, hoy, después de haberte visto, ningún interés.
Di a Selga que no pasará mañana sin que Iglesias sepa que está aquí, y tenga su dirección. Me encanta saber que disfrutaras plenamente del “concierto” al que asististe. Me gusta que hubiera cada parte del programa distinta de las otras. Tu paréntesis me enternece. Mi violín quedó muy bien. Pero creo que cuando tu te fuiste ya iba con menos frecuencia a las lecciones por ser incompatibles con las horas de oficina de casa Alter. No obstante conseguía tocar bastante limpio aquellas composiciones de Ainaud.
El tenor en Grecia un Merly o por el estilo? Lástima de que el piano no estuviera a la altura del resto del programa. Refrena tus impulsos “cantatorios” que si Dios quiere, podremos pronto —¿tú crees?— volver a cantar como en aquellos “buenos tiempos” que me recuerdas en tu escrito. A pesar de los remojones creo puedes estar satisfecho de la velada. Ninguna cosa que cumplimentar dejé en la pensión de aquella Sra. a no ser agradecerle por enésima vez los cuidados solícitos que tuvo conmigo. Veo que te vas volviendo sabio, pues te olvidas de todo. Primero no pones la fotografía, que he recibido hoy, y después no anotas la dirección de la H. Aurora. Sigue, sigue, con tus adelantos, pero no olvides nunca que a la calle, la sociedad, exige que la gente salga vestida. La H. Aurora recibe sus cartas a Colegio de Carmelitas / Calle La Compañía / Santiago de Chile. La M. Carmen me hace la observación de que no ponga casa de la caridad porque dice que allí no son conocidas por ese nombre y pudiera dar lugar a confusiones. Toca ahora el turno a tu carta 4 Marzo. Acusas recibo de mis cartas 28.1. No te preocupes por mi pecho, pues como te decía en mis anteriores va sanando poco a poco. Ya te dije lo del Dr. Portugal. En cuanto venga, un reconocimiento minucioso.
Agradezco tu deseo, pero todavía no he recibido la tan esperada carta. Preocúpate porque no es cosa también de perder tus tres cartas.
Me alegro de que haga buen tiempo y rememoréis los tiempos heroicos de nuestro excursionismo. Yo no puedo hacer eso. Ni tan solo pasear mucho por la ciudad, porque me canso horrores.
Celebro que la cruz roja y el cuerpo de Sanidad no hubiesen de tener intervención alguna en la batalla campal desarrollada en vuestra morada.
Ninguna novedad por mi parte. Mañana sale para San Sebastián el teniente Cotó y como de regreso es probable que pase por Santander le he dado el encargo de pasarse a Lista de Correos a enterarse de lo de mi carta. Un saludo para todos y un fuerte abrazo de
Daniel
A ver si entre todos ponéis en cintura a la fiera futura Flecha Negra. I Selga, que cuando escriba no ponga esos epitafios.
Me notifica Serch que el dia 28 de diciembre entró en la España de Franco, Capó, el atleta de Manresa, a la vez que novio de su hermana Maria. Otro más que engrosa las filas del victorioso ejército del Caudillo.