La fosa militar
del cementerio de Manresa

Imposible olvidar

Detrás de cada nombre de un soldado muerto de  la Guerra Civil (1936-39) hay la  historia de una vida humana. Una vida joven, con todos los proyectos e ilusiones propios de la edad. Una guerra que ellos no habían provocado se la cortó en seco.


Restituir sus nombres, recordarlos (a  ellos y a las circunstancias históricas que les tocó vivir) es una obligación moral de cualquier  sociedad democrática y una tarea imprescindible para combatir la desmemoria.


Luchar contra el olvido es la mejor manera de evitar que renazcan monstruos como la falta de  libertades, el agravamiento de  las desigualdades sociales, la xenofobia, el racismo o  la persecución de las minorías, ya sean étnicas, nacionales o culturales y lingüísticas.